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RIO 850 Day cruiser
Nautica, n° 171 agosto 2003
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ACIERTO PLENO
Gracias a su notable envergadura, la Rio 850 Day Cruiser ofrece, con la estampa de una lancha, unas facilidades para permanecer en el mar que son muy difÃciles de encontrar juntas en cualquier otro modelo.
De nuevo Rio sorprende con una embarcación que se aparta de lo habitual y, sin embargo, acierta de lleno en las necesidades reales del mercado.
Sorprende, porque él nombre parece -solo parece- que no encaje, toda vez que cuando uno escucha la denominación "day cruiser" espera encontrar una embarcación cabinada, en cuyo interior hay espacio para que puedan pernoctar varias personas. En este caso, la estampa se aproxima más a un modelo de consola central o walkaround. Sin embargo, a medida que uno se fija más de cerca en el barco, aumenta la sorpresa, por lo ingenioso de la solución y, además, porque este modelo encaja perfectamente en el programa de navegación del crucero de dÃa.
La Rio 850 es, efectivamente, una day cruiser, pues bajo la cubierta de proa existe una espaciosa cabina; pero también es una walkaround, ya que su cubierta puede ser rodeada en buena parte, a la vez que mantiene una imagen informal y deportiva propia de los modelos de consola central, con el puesto de gobierno abrigado por una importante consola, eso sÃ, desplazada a estribor, con la finalidad de dejar un consistente pasillo lateral a babor. No sucede como en la 750 Sol, donde el pasillo de estribor se habÃa suprimido por completo; aquÃ, la generosa manga de 3 metros permite dejar un pasillo suficiente para colgar las defensas y quizás tan ancho como el que ofrecen otros modelos de menor envergadura.
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A proa del baño de sol se ha previsto una guenatera para tener a mano los pequeños objetos que se suelen utilizar en esta zona. |
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En proa, la maniobra de amarre y fondeo está bien resuelta, pero la tapa del pozo solo se fija con un clip, de modo que no estarÃa de más un seguro exterior. La disposición del balcón y del botalón, ocultando el ancla, facilitan el paso por este sitio. |
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CUBIERTA Y BAÃERA
El tamaño juega a favor de la Rio 850 Day Cruiser como en pocas ocasiones. La consola distribuye el espacio a proa y a popa de forma muy clara y sin complicadas polivalencias de mobiliario: baño de sol a proa y zona de estar y navegación a popa.
El pasillo lateral de babor, amplio y bien protegido, permite que personas de todas las edades puedan transitar con seguridad hasta casi el mismo extremo de proa, dejando una enorme superficie de solárium a la derecha, ligeramente elevada sobre el piso; sin embargo, el pasillo de estribor, más estrecho, solo llega a rodear la consola y, una vez finalizada ésta, se funde con la misma superficie que da cabida al solárium, es decir, el pasillo lateral de estribor no lo rodea por completo.
Esto permite dos cosas: aumentar la superficie destinada a las colchonetas y dar más altura y volumen a la cabina interior. Ya en proa, se aprecia el decisivo trabajo realizado en la mesa de diseño y en el desarrollo de modelos y moldes, tarea realizada por el equipo técnico de la localidad de Girona.
Los pasamanos que nacen casi en popa culminan en un balcón semiabierto, sobre un botalón integrado. E1 balcón cuenta con un peldaño de madera, material que también está presente en el botalón y en un peldaño lateral; se han previsto dos portadefensas, dos cornamusas, los interruptores del molinete eléctrico de 700 vatios -de serie- y una tapa de pozo que deja el cabirote a la vista. Incluso se ha previsto un cofre -con desagüe- para poder guardar a mano objetos pequeños, aunque a la tapa del pozo le falta un seguro para evitar eventuales aberturas accidentales en caso de navegar con mal tiempo.
La zona de popa se destina a estar y permite también que un buen número de invitados naveguen sentados. Para ello se ha previsto un sofá en forma de "L" en la aleta de babor, con espacio de estiba debajo, frente al que se monta una mesa para poder comer al aire libre; visto que las sillas del puesto de gobierno son giratorias, no cuesta nada configurar aquà una buena zona de estar; una escotilla en el piso da acceso a un gran cofre de estiba desde donde se pueden registrar también los dos depósitos de combustible.
Una puerta en la banda de estribor permite comunicar la bañera con la plataforma de baño, sencillamente enorme y en la cual se ha previsto un gran sofá exterior sobre un cofre donde guardar los objetos húmedos como paloniers, aletas u otros parecidos; hay cuatro portadefensas en aleta de babor, mientras que la escalera de baño queda oculta en la aleta de estribor y la ducha está en la misma banda, pero en la bañera, donde también se han previsto posavasos y estantes abiertos.
Vale la pena comentar que el forro de teca en la plataforma y en el puesto de gobierno otorgan una nota de color al conjunto, como también que el parabrisas y todos los metacrilatos -posavasos, estantes- son del mismo color azul, y que existe la posibilidad de montar motores fueraborda sin perder la plataforma; ello es posible porque, al igual que sucede en el modelo 750 Sol, los fueraborda se cuelgan del espejo, mucho más adelantado, quedando un perÃmetro de la plataforma suficientemente amplÃa para poder cumplir con su función.
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Toda la cubierta de proa plantea un diseño muy agradable, combinado con soluciones muy funcionales.
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El pasillo lateral de babor es muy amplio y profundo, lo que proporciona una gran seguridad de movimientos.
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Cuatro defensas se estiban a la vista en la aleta de babor.
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PUESTO DE GOBIERNO
La consola y la configuración de la cubierta de la RÃo 850 Day Cruiser proporcionan una buena protección a la zona de navegación, con el puesto de gobierno situado a estribor. El parabrisas está rodeado por un pasamanos de acero que facilita la movilidad a bordo, mientras que los indicadores de los motores -en negro - se sitúan sobre un panel plateado, combinación de colores que también ofrece el manillar deportivo, dotado de dirección asistida, de manera que sin muchos alardes de diseño se consigue en este barco un notable efecto de unidad estética.
El compás es de serie. Las palancas de los motores quedan a una buen altura para poder gobernar de pie o sentado, habiéndose previsto un apoyapiés integrado en el moldeado del pupitre para este último caso, moldeado del que también dispone el acompañante. Estos apoyapiés son necesarios, pues las sillas son muy altas para dotar a los ocupantes de la necesaria visibilidad; si alguno de nuestros lectores se imagina balanceándose en lo alto de estas sillas, más vale que se lo quite de la cabeza: son de una solidez intachable. Por cierto, los dos interruptores de power-trim estaban en la palanca de la izquierda, facilitando el trimado del barco, lo que no sucede si se elige otra marca de motores.
Todo el conjunto está protegido por una arquillada plegable que, en función de la orientación del barco, puede prestar servicio también a la zona de estar de popa.
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Ducha, desconectador y extintor están cerca de la aleta de estribor. Vale la pena fijarse en el detalle de la puerta de la plataforma, que permite manipular la ducha incluso cuando está abierta.
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Pasamanos, guanteras y posavasos poseen una interesante unidad estética con el resto del barco y con la nueva gama de modelos que está impulsando Rio.
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Bajo el piso de la bañera hay un gran cofre de estiba; se aprecia en la imagen la disposición de los dos depósitos de combustible.
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Para compensar la altura de los asientos, se ha previsto una franja a modo de apoyapiés frente a cada uno de ellos.
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La popa del barco se destina a zona de estar, combinando las posibilidades de la bañera y de la plataforma de baño.
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La enorme superficie destinada a baño de sol está descentrada a estibor, ocupando el espacio que corresponderÃa al pasillo de esta banda.
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INTERIORES
A menudo, cuando se habla de este tipo de lanchas resulta un eufemismo denominar "interiores" al espacio existente bajo la consola, pero en este caso no es asÃ. El espacio disponible es mucho mayor de lo que uno espera encontrar a priori y, además, ha sido tratado con un elevado nivel de calidad por lo que hace a materiales y detalles.
El ambiente principal cuenta con el tÃpico sofá en forma de "V" que rodea una mesa en la que podrán comer varias personas; basta colocar la mesa -la misma que se utiliza en el exterior- en su posición infenior para convertir toda la superficie disponible en una gran cama, con posibilidades reales de pernoctar a bordo; hay cofres de estiba en las bandas y en proa (en madera), puntos de luz en el techo y portillos laterales con cortinas.
En la banda de babor se ha dispuesto un mueble cocina con frigorÃfico, fregadero, dos quemadores a gas y un armario bajo; lógicamente, el pasillo exterior impide la instalación de armarios altos, de modo que hay que entender la cocina con las limitaciones propias de este tipo de barcos, pero suficiente para calentar o preparar platos sencillos.
El espacio disponible debajo de la bañera se ha aprovechado para instalar una litera adicional, lo que eleva a tres el número de ocupantes posibles a la hora de pernoctar a bordo, pero lo más probable es que este volumen se aproveche como lugar de estiba, para tener los pertrechos bien a mano, pues la escalera de acceso deja poco espacio para pasar a la parte posterior.
Sin embargo, el astillero ha hecho un gran esfuerzo por dotar a esta escalera de una gran calidad, pues presenta dos sólidos peldaños de madera sobre una sola barra de soporte de acero, de modo que se consigue con este efecto una buena comunicación entre el interior y el exterior, a la vez que no se cierra visualmente la litera posterior, evitando asà un efecto claustrofóbico para la persona que la ocupe.
Un gabinete de aseo separado ocupa la banda de estribor, equipado con WC marino, lavabo, espejo y un armario bajo, con la particularidad que la encimera del lavabo se prolonga en el mamparo creando un efecto decorativo; esta encimera es del mismo material que la de la cocina, de modo que se consigue una cierta unidad estética. No falta el portillo de aireación y ventilación natural, con su cortina.
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En el interior se ha conseguido un amplio espacio de estar, convertible en gran cama matrimonial, además de contar con varios detalles que hablan positivamente del interés del astillero por completar esta zona. |
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El cuarto de aseo cumple con las expectativas de este programa de navegación. |
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| Los peldaños de la escalera de acceso al interior son de auténtico lujo por las dimensiones y los materiales, pero el acceso a la tercera litera no da para más. |
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La cocina está bien equipada, pero el pasillo de la configuración walkaround impide la existencia de más armarios. |
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Velocida máxima , 31, 5 nudos a 4.800 rpm
Velocidad de crucero, 25 nudos a 3.800 rpm, con dos motores dentrofueraborda MerCruiser 3,0L de 135 caballlos.
Tiempo de planeo, 7 segundos
Aceleración de 0 a máxima en 17 segundos
AutonomÃa mÃnima de 120 millas o casi cuatro horas de velocidad máxima.
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NAVEGACIÃN Y CONCLUSIONES
La singularidad de la Rio 850 Day Cruiser se aprecia también en el casco. Está dotado de una V muy profunda a proa y suavizada en popa, pero con un canto muy pronunciado y dos redanes longitudinales por banda, no solo muy considerables de tamaño, sino también dispuestos de forma poco habitual, pues el más alto de los dos está muy cerca del canto de manera casi consecutiva. El resultado de todo ello es una forma de navegar muy sólida y confortable, pues el barco resultó extraordinariamente cómodo, incluso con un poco de mar, permitiendo buenos giros y aceleraciones.
El patrón percibe enseguida la sensación de mandar sobre las circunstancias. Con el mar algo picado bastó levantar un poco el powertrim para dejar que el casco golpease sobre el agua un poco más atrás para conseguir navegar a buen ritmo sin percibir el más mÃnimo atisbo de pantocazo. El barco se puede propulsar con motores fueraborda o con colas. En el caso de elegir fuerabordas, Rio ofrece paquetes con un motor de 225 caballos o dos desde 90 hasta 150 caballos. Si se opta por los motores dentrofueraborda, las opciones son muy amplias: desde un Volvo diesel KAD 43P de 230 Hp (218 al eje de la hélice) hasta los dos Mercruiser 3.OL de 145 Hp (135 al eje de la hélice), 290 caballos en total, lo que permite configurar una variada gama de posibilidades y obtener todo tipo de prestaciones, como disfrutar de un plácido crucero por encima de los 30 nudos.
La unidad probada montaba la máxima potencia con colas, con los dos Mercruiser de 135 Hp, lo que nos permitió con el barco nuevo y sin pintar hacer planear el barco en solo 7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 31,5 nudos a 4.800 rpm, exactamente el régimen máximo previsto para estos motores, lo que indica que la selección de las hélices, en este caso de paso 18 pulgadas, fue la acertada. No obstante, también hay que señalar que esta unidad era la primera construida y que el astillero estaba convencido en rebajar algunos kilogramos de peso en cuanto el modelo entrase en producción normal, de modo que se podrán obtener mejores resultados.
Claro que siempre hay que tener presente que se trata de un barco ancho, grande, contundente, no de una lancha de alta velocidad. Desde el punto de vista de las prestaciones, la unidad probada nos pareció acertada. SucederÃa igual con montar un solo motor de la misma potencia equivalente, mÃnimamente más barato de compra, pero más económico de mantenimiento, seguramente más veloz, si bien con dos motores se facilita la maniobra y se tiene una reserva de seguridad adicional.
La autonomÃa está también muy de acuerdo con el programa previsto, o aún por encima, pues estimamos que con la motorización probada se podrán recorrer sin repostar un mÃnimo de 120 millas. En cualquier caso, este modelo viene a llenar un hueco muy necesario en el mercado. No es frecuente encontrar embarcaciones de esta envergadura que permitan a un buen número de personas disfrutar de la navegación y de los deportes náuticos durante el dÃa, con la posibilidad del camping náutico para dos o tres ocupantes, cuando resulta que este tipo de programas suele ser el más habitual. El éxito, en general, de la tipologÃa de consola central asà lo acredita, y la Rio 850 Day Cruiser no hace sino mejorar la oferta en este sentido.
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Blanco, negro y plata son los únicos colores que juegan en el puesto de gobierno, resuelto sin complicaciones. |
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Los asientos del patrón y del acompañante son confortables. |
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La escalera se despliega desde la aleta de estribor; no falta un reborde en la plataforma para asegurar la posición vertical de la propia escalera. |
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A simple vista, la bañera de la Rio 850 Day Cruiser presenta una distribución convencional. |
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